1. No te han dado permiso:

Las direcciones de email solo se deben añadir cuando alguien voluntariamente se suscribe.

2. La información del remitente es incorrecta:

Asegurar que el remitente y el encadenamiento del mensaje son correctos. Comprobar que la configuración del Registro SPF es correcta, y el dominio de Fideltour está añadido.

3. No existe una dirección física:  

Añadir una dirección válida de la empresa en el CTA de la comunicación.

4. Estás utilizando palabras de spam:

Los filtros de spam analizan el contenido que hay dentro del email y deciden si van a la carpeta de spam o a la bandeja de entrada de tu cliente. Intenta evitar las palabras desencadenantes.

5. Tu título no es suficiente:

Una mayor parte de los destinatarios notifican si un email es SPAM observando el asunto. Hay que evitar las mayúsculas en exceso , las exclamaciones, falsas promesas y el no ser insistente.

6. Has incluido archivos adjuntos:

Los archivos adjuntos deben evitarse por dos razones.

Primero, alertan a los filtros de spam y reducen las probabilidades de el email llegue a la bandeja de entrada de tu destinatario. Ya que, afirman que un archivo adjunto tiene probabilidades de incluir virus peligrosos.

Segundo, pueden ralentizar el tiempo de carga, sobre todo si son grandes y pesados.

7. Hay una imagen grande con poco texto y no tienen un texto alternativo:

Evitar añadir imágenes grandes sin texto apenas o que estas imágenes sean muy pesadas.

9. No hay enlace para darse de baja:

Por eso es primordial (y obligado por ley) poner un enlace para darse de baja.

10. Estás enviando emails a direcciones inactivas:

Si envías varias veces a direcciones inactivas, los filtros de spam penalizarán su dominio o ISP. Asegúrate de limpiar con frecuencia las direcciones inactivas.

10. Hay errores de ortografía y gramática:

Los errores ortográficos y gramaticales podrían hacer que tu email acabe en la carpeta de spam.